Este pequeño detector de movimiento de tan sólo 2 centímetros de diámetro resulta ideal para exteriores por su protección IP65. Entre sus funcionalidades destaca que permite ajustar el tiempo de encendido, el rango de detección y la sensibilidad de la luz.
A diferencia del resto de detectores, éste dispone de un campo de detección de hasta 8 metros y un ángulo de cobertura de 360º. En cambio el funcionamiento es el mismo: Utiliza los infrarrojos como fuente de activación cuando se entra en el campo de detección gracias al detector crepuscular que tiene incorporado. El detector es capaz de captar emisiones invisibles infrarrojas procedentes de cualquier fuente de calor sin emitir radiación.
Este producto es un dispositivo versátil y funcional que cuenta con un sensor de luz, ajuste de sensibilidad y retardo de tiempo. Está diseñado para ofrecer comodidad y eficiencia en una variedad de entornos.
El sensor de luz integrado. Permite que el dispositivo detecte automáticamente la cantidad de luz presente en su entorno. Esto garantiza que se adapte de manera inteligente a diferentes condiciones de iluminación, lo que lo hace adecuado tanto para uso en interiores como en exteriores.
- El ajuste de sensibilidad. Permite al usuario personalizar la respuesta del sensor de luz a diferentes niveles de iluminación. Esto asegura una detección precisa y confiable.
- El retardo de tiempo. Permite al usuario establecer un intervalo de tiempo específico antes de que el dispositivo responda a un cambio en la iluminación.
Destaca su reducido tamaño que le hace pasar totalmente desapercibido. Además esta característica le dota de gran versatilidad pudiéndose adaptar a los más diversos espacios como una bandeja led, un panel 60x60 o cualquier tipo de luminaria.